viernes, 26 de junio de 2009

"Aromas"

(fotografía en curso)
"Extraños momentos tiene la vida,
donde el azar atrapa en el mismo nudo sin sentido
universos tan distintos a veces como
alejados.

Y asi ocurrió en la soleada mañana
en que nuestros caminos imposibles se cruzaron,
yo con la primera tentación del día; tú con paso
apresurado.

Acortamos distancias convergiendo;
y llegados a lo mas angosto de la acera forzamos
un ridiculo baile, quedando nuestros pasos
mezclados.

Y la química fundió en un mismo espacio
el recio aroma de las volutas expelidas por mi habano
y el que desprendía tu sutil perfume, caro
y sofisticado.

Y quedó flotando en el aire
la impúdica comunión, entre la fragancia del angel puro
y la vulgar nota, una más, de mi mundo
depravado.

Luego, me detuve un instante,
por apresar la esencia de ese momento y repasar furtivo
la línea de tu cuerpo. No me importó parecer
descarado.

Y entonces tú, volviste el rostro
sorprendiendo la turbidez de mi mirada; cómplices,
ambas pupilas, del mismo y silencioso
pecado..."
(Horace)

viernes, 5 de junio de 2009

"El regazo soñado"

"Hoy, con mi última copa de malvasía,
brindo por el sueño de esa mujer sin edad,
en cuyo cálido y frágil regazo
reposan confiadas mis húmedas mejillas.
Esposa, madre, hija, hermana, desconocida,
refugio consolador, tibia piel,
acogedor lecho de incuestionable amor
dónde la ficción del tiempo se olvida.
Donde sólo escucho sosegado
el latido amable de su corazón
tranquilo, seguro, generoso y fiel,
con aromas de trigal maduro,
fecundo al sol dorado del mediodía.
Donde el único ritmo vital que importa
lo marca el sinuoso y callado oleaje
de su respiración pausada y paciente,
cuidadosa en no alterar la penumbra
de mis párpados cansados en tantas vigilias.
Con mi mente ya vacía de alertas,
de recelos, de malicias y de pasiones,
sólo concentrada en la sensación sutil
de la mano blanca que amorosa desenreda
los cabellos de mis sienes encanecidas.
Sin un sólo pensamiento capaz de robar
esta inmensa sensación de paz infinita.
Donde origen y fin de la existencia
se encuentran, cerrando definitivamente
el circulo perfecto y fértil de la vida.
Por eso brindo hoy por ese regazo perdido.
Con el último sorbo de esta botella
ya vacía..."